Agua Alcalina Lahuenco es procesada en nuestra propia planta, ubicada en la comuna de Maipú y se encuentra certificada por el Servicio Regional de Salud Metropolitano, mediante resolución sanitaria Nº 191323453, del 25 de febrero de 2019, y por los laboratorios especialistas en análisis de agua, Hidrolab y Sisqam.
El proceso de purificación utiliza filtros de arena, para retener partículas en suspensión; filtro de carbón activado, para eliminar cloro y otros contaminantes orgánicos; filtro de cinco micrones, para la retención de partículas y bacterias; osmosis inversa, para eliminar las sales minerales y desinfección, incorporando gas ozono al agua ya procesada. El resultado final es un agua no sólo de extraordinaria pureza, sino también de exquisito sabor.
El agua alcalina es agua tratada de tal que se aumenta su nivel de pH. El valor de pH es un número que indica qué tan ácida o alcalina es una sustancia en una escala de 0 a 14, siendo pH 0 muy ácido, 14 muy alcalino y 7, neutro.
Por seguridad, la norma chilena permite un pH máximo de 8,5 ya que un pH de 9,5 o superior es perjudicial para el organismo humano. El Agua Alcalina Lahuenco tiene un índice de pH de 8,5, un grado de alcalinidad que aporta relevantes beneficios para el buen funcionamiento del cuerpo humano.
Durante el proceso de alcalinización se incorpora magnesio, calcio y antioxidantes.
El magnesio es fundamental para las funciones metabólicas y la síntesis de aminoácidos, proteínas y de la serotonina, un neurotransmisor que regula los estados de ánimo; también aumenta la absorción intestinal de calcio.
Por su parte, el calcio es elemento indispensable para evitar la osteopenia y la osteoporosis.
Finalmente, las proteínas son las encargadas de reparar y renovar los tejidos del cuerpo. Por ser de más fácilmente absorbible a nivel celular, el agua alcalina es hasta seis veces más hidratante que el agua normal, lo que la hace altamente recomendable para deportistas.
El agua alcalina presenta algunas de las siguientes características:
- Revierte la deshidratación y el cansancio tras la práctica deportiva o esfuerzo físico de otra naturaleza.
- Contribuye a mantener una piel más lozana.
- Controla el reflujo gastroesofágico y la acidez estomacal.
- Combate el estrés oxidativo.
- Neutraliza los radicales libres, dañinos para el cuerpo.
- Protege los huesos.
- Regula la presión arterial.
- Mejora la función cardiovascular.